viernes, 24 de septiembre de 2021

SpeedOut

 

SpeedOut



No me pregunten por qué. Quizá fuera por aburrimiento, por mi vicio de leer cosas de dudoso o nulo interés personal, o espoleado por la curiosidad de saber qué demonios es eso de SpeedOut referido a una empresa consultora, acabé leyendo el artículo SpeedOut ficha como socio a Rafael Aguado, en el diario digital Valencia Plaza. Masoquismo, dirán algunos; curiosidad malsana, dirán otros. Lo cierto es que —ahíto de volcanes y no habiéndose producido aún la detención de Puigdemont— la lectura resultó ser insospechadamente entretenida.

En el primer párrafo me entero de que la consultora ha fichado al susodicho para “afianzar el asesoramiento a “family offices”, lo que me obliga a consultar qué demonios es eso de family offices, cuyo significado intuyo. Cómo no, se trata de la gestión del patrimonio de las familias pudientes, que no de la mía ni de las de mis familiares y amigos, pero en inglés. Siempre se aprende algo.

En el siguiente párrafo me entero de que el tal Aguado (Rafa, para los amigos) tiene una solvencia reconocida en el ecosistema empresarial valenciano, tanto en el innovador como en el de “private equity” y empresarial. Joder, con el nuevo socio; no sólo es reconocido en el ecosistema innovador o el empresarial sino que es un lince en eso del private equity, que es lo que al parecer llamábamos “capital inversión” o adquisición de paquetes mayoritarios de acciones de empresas con el ánimo de especular. Más o menos, lo que hacía Richard Gere en horario de oficina en la película Pretty Woman.

La firmante del artículo nos informa, unas líneas más abajo, de cuál es la línea de “corporate finance” (que como su nombre indica es el diseño de la financiación de una empresa) que más peso tienen en la cuenta de resultados de la consultora, además de las conocidas asesorías a las “startups” y a las “scaleups” (que son lo mismo, pero unas más avanzadas que las otras), para ilustrarnos más abajo con el hecho de que otra de sus áreas de trabajo es la de abordar procesos de “corporate venturing”, que es algo así como el capital de riesgo corporativo, pero con más caché.

También se nos informa que no es objeto de la consultora conducir a las “family offices” por las trilladas aguas del “real state* o mercados inmobiliarios”, lo cual es comprensible; en primer lugar porque el “real state” no existe; en todo caso se trataría de real estate (bienes raíces) y no veo que haya alguna diferencia entre esto y mercados inmobiliarios, la verdad.

Ya creí que me había entretenido bastante con todo eso de las family offices, prívate equity, startups y scaleups, corporate venturing, real estate y otras zarandajas gourmet  cuando me encontré con que, además, la consultora con el atractivo nombre de SpeedOut puede ser útil a los fondos de capital riesgo (pivate equity, con perdón) haciéndoles una función de “scouting” en un terreno (el valenciano) conocido por ellos.

Ahí es nada. No me digan que el artículo no resulta entretenido. Como decía el anuncio aquel de perfume: “Hay muchos mundos, pero están en este”.

https://valenciaplaza.com/speedout-ficha-como-socio-rafael-aguado

 

Román Rubio

Septiembre 2021

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martes, 14 de septiembre de 2021

LADIES & GENTLEMEN

 

LADIES & GENTLEMEN



El último sainete del lenguaje inclusivo ha ocurrido en Gran Bretaña, en concreto en un tren de la compañía London North Eastern Railway, en el que el conductor tuvo la desvergüenza de dirigirse al público del convoy con un inaceptable: “Good afternoon, ladies and gentlemen, boys and girls” (Buenas tardes, señoras y caballeros, niños y niñas). Tamaña afrenta molestó enormemente al pasajero Laurence, que rápidamente denunció al conductor a sus superiores vía Twitter alegando que eso de “señoras y caballeros, niños y niñas” a él, como persona no binaria que es, no le incluía y que por tanto las indicaciones no le afectaban.

Así de claro lo tenía el chaval, lo que para mí no es una noticia, pues cada cual entiende el mundo a su manera y vive su propia paranoia.

Lo que para mí constituye una noticia es la respuesta de la compañía, que no tardó nada en contestar al tal Laurence por la misma vía, de la manera siguiente:

Siento mucho lo ocurrido, Laurence, nuestros Jefes de Tren no deberían usar esa clase de lenguaje, y te doy las gracias por ponerlo en mi conocimiento, Por favor podrías decirme en que servicio te encuentras y me aseguraré de que se comporten tan inclusivos como nos esforzamos por ser en LNER (London North Eastern Railway).

La respuesta de la compañía ha tenido en Gran Bretaña una gran repercusión, levantando la polémica en medios escritos y redes sociales. ¿Es aceptable dirigirse al público con la socorrida fórmula de cortesía “ladies & gentlemen”? ¿Qué hacemos con los que no se sientan ni “señora” ni “caballero”? ¿Podríamos usar el término “mediopensionista”, o quizá decir algo así como “good afternoon, everyone? En inglés, la solución es fácil: esta última fórmula incluye a todos, puesto que “one” vale lo mismo para “uno” que para “una”, o para “une”, si me apuran, pero en español ¡ay, en español! la cosa se complica, ya que la formula “buenas tardes a todos” no sería aceptable por las mismas causas, debiendo añadir “todas” y “todes”. O bien, usar un circunloquio del tipo “todo el mundo”, lo que no es del todo exacto (hay una parte significativa del mundo que no viaja en el tren) y esperar que personajes como Laurence se sientan aludidos y no discriminados ni ofendidos.

Aceptemos la puntillosidad en el lenguaje inclusivo y los recelos que levanta. Fijémonos ahora en el otro lenguaje, el normativo: la coma después de “this” es, cuanto menos, redundante y la de detrás de “attention” es antinormativa, ya que debería ser un punto, como el mismo autor del mensaje reconoce de manera implícita al escribir la palabra siguiente, “Please”, con mayúscula.

De modo que, si hay que cogérsela con papel de fumar en lo referente al lenguaje inclusivo para no lesionar los sentimientos de las diferentes sensibilidades de género, ¿por qué no ser igual de escrupulosos con la ortotipografía para no ofender a los usuarios de la lengua, sean estos del género masculino, femenino o neutro?

Román Rubio

Septiembre 2021

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