MOTOMAMI
Esta mañana, leyendo lo de El Comidista en El País,
me he encontrado con un par de referencias que me han intrigado. Hablaba de los
sabrosos desayunos andaluces y extremeños que incluyen las tostás con manteca colorá,
las pringás, la cachuela y otras
delicadezas del cochino a las que califica de “motomamis” calóricas, así como a
la zurrapa (otra “motomami” calórica).
¿Motomamis? ¿Qué demonios es eso? Me he visto
abatido por el desánimo del que de pronto se da cuenta de que pierde las
referencias del mundo que le rodea y se ve anclado en un mundo anterior, o
exterior, ¿quién sabe? Acto seguido, afortunadamente, el mismo artículo aclara
lo que quiere decir el acertijo: “Esta
familia de ‘motomamis’ calóricas, tan poderosas y explosivas como las de Rosalía,…”
Ah, bueno; se refiere a la famosa artista catalana y al título de lo que parece
ser su último trabajo. Vale.
En el mismo periódico, algo más abajo en la edición
digital, la periodista Nuria Labari publica una columna titulada “Los 20 mandamientos Motomami según Rosalía,
comentados”. ¡Bravo! En la misma página me viene el jeroglífico y la
solución, de modo que me dispongo a leer ese decálogo (perdón, que son veinte),
esas Tablas de la Ley, ese Código de Hammurabi de las motomamis, y encima comentado, por si no me entero bien de los
mensajes, menos mal. Vamos allá.
1 “Una
motomami te abraza y es mejor que abrazar un peluche”
Estoy de acuerdo. No le veo mucha profundidad al
mensaje, pero tampoco se lo veo al “No matarás” y lo transmitió el mismísimo Yahvé
a Moisés.
2 “Es leal con
los suyos porque ser leal es un flex”
Vaya, seguimos con los enigmas. ¿Qué será eso de un
flex? Antes era un colchón. Aún recuerdo el eslógan, “Flex, Flex, Flex, de lo bueno lo mejor”.
3 “Cuida a
otras motomamis”
Lo entiendo. Esta es fácil.
4 “A una motomami le gusta la leche”
Ay, ay, ay…
5.- “Tiene las
manos de mariposa y brazos y cuerpo de mariposa también”.
Vale. Tú sabrás.
6 “Destruye
con gusto sus obras anteriores para dar paso a las obras siguientes”
El mensaje parece claro: habla de la renovación del
artista; algo así como el artista fallero, que necesita quemar el trabajo del año
anterior para poder montar el siguiente.
7 “No
necesita, la necesitan”.
Mensaje nítido. Muy bien, Rosalía. Con un par.
En fin, no voy a reproducir aquí los veinte
mandamientos que al parecer la artista ha publicado en Twitter, que constituyen
la esencia de la motomamía y que Nuria Labari reproduce y comenta en su
artículo. Solo diré que algunos llevan lo que para mí (pobre ignorante) es un
mensaje claro y otros oscuro, cuando no incomprensible. Entre los primeros: “Sabe quién es y lo lleva por delante porque
es brava”, o el muy expresivo “No le
importa mancharse las manos cuando las pone dentro del motor para ajustarlo”;
y entre los oscuros: “Frontea con moto, protege tu mami”, o “Te puede ride como a su bike”.
En definitiva, que me he dado cuenta, no sé si con
melancolía o cierto alivio, de que no me entero; o de que, todavía peor, me
entero de las cosas por la lectura más que por la vida misma, y que empiezo a
comprender mejor los mensajes de los textos de Los Ensayos de Montaigne, del siglo XVI, que los de Rosalía y otras
lumbreras de hoy. Lo cual es preocupante. ¿O no?
Adiós, mundo cruel.
Román Rubio
Marzo 2022