miércoles, 9 de noviembre de 2016

AMERICA

AMERICA

















A los Estados Unidos, sus ciudadanos  lo llaman America y ellos mismos se denominan Americans. Al resto del continente le llaman The Americas y a los ciudadanos… Bueno, depende de donde provengan son Canadian, Mexican, Argentinian… Han tenido elecciones a la presidencia y, quizá han oído o leído algo, ha ganado Donald Trump. Lo cierto es que la gente de mi país estaba convencida de que no iba a ser así, que la victoria de Hillary Clinton estaba cantada, o como siempre se dice, habían vendido la piel antes de matar al oso. Yo nunca me pronuncié. Me temía lo peor y no quería ser aguafiestas.

Veamos: en los últimos meses hemos vivido el Brexit (inesperado), el voto No a la firma del tratado de paz en Colombia (también inesperado) y la victoria del Gran Payaso del Tupé Inverosímil (inesperado y rechazado con horror por la mayoría). ¿Qué ocurre con las consultas al pueblo que la totalidad –consideremos el referéndum de Escocia una anomalía- se decantan por el lado peligroso? En mi opinión es la rebelión ante lo que se considera que va mal lo que hace dar estos saltos al vacío. Para el británico y el norteamericano medio las cosas van mal en sus países (se nota que no se comparan con otros); las fábricas se van a China o Vietnam y la generación que viene, por primera vez en décadas o siglos no tiene perspectiva de vivir mejor que la anterior como ha ocurrido siempre, de modo que el pueblo, esa masa de  carne de tele y centro comercial decide votar a quien le arropa con la bandera y les protege del de fuera. Así de sencillo.

El mapa electoral de los EEUU, como el de otros tantos lugares es tozudo. Sea quien sea el que se presente a la elección hay unos estados que votan rojo y otros que votan azul. Así; sin más; siempre. Puedes andar desde México hasta Canadá por todo el centro del país, de sur a norte, cruzando Texas, Oklahoma, Kansas, Nebraska, Dakota del Sur y Dakota del Norte pisando exclusivamente territorio republicano. Se presente a la elección quien se presente. Es el país de la camioneta pick-up, sombrero tejano, vacas, petróleo y música country, calles sin aceras, centros comerciales y armas en las casas. No importa que los orígenes de la mayoría sean europeos. Para sus gentes, Europa es una entelequia lejana y ensimismada a la que hay que liberar de cuando en cuando de sus propias tendencias suicidas propiciadas por su propia debilidad.

Si te desplazas al Pacífico (unos 2.000 kms hacia el oeste puedes andar desde México a Canadá atravesando los estados de California, Oregon y Washington pisando exclusivamente territorio demócrata. En la costa Este el panorama es más variado. El Norte -Maine, Vermont, Massachusetts, Nueva York, Nueva Jersey y Virginia, lo que conocemos como Nueva Inglaterra-, es claramente demócrata, en tanto que conforme vamos hacia el sur vamos entrando en territorio republicano, hasta llegar a Florida en donde hay empate técnico. Y ahí acaban todos los argumentos demócratas. Ahí y en un par de estados de la zona de los Grandes Lagos, significativamente Illinois, en donde se encuentra la metrópolis de Chicago. En resumen, que tengo la impresión de que… "aquí pasó lo de siempre: han muerto cuatro romanos y cinco cartagineses".

Entonces, si damos por ganados y perdidos los territorios de siempre; si concluimos -así, a grandes rasgos- que los estados de paletos, vaqueros, petroleros y de la basura blanca votan republicano y los urbanitas, universitarios, homosexuales, negros e hispanos votan demócrata, ¿dónde se resuelve la elección? Pues, como siempre, y perdonen que insista en lo archisabido, en los estados de Florida y Ohio, que tienen el suficiente número de votos electorales para decantar a uno u otro lado el resultado de la elección. Si hubiera que hilar todavía más fino, fíjense en Pennsylvania y en Carolina del Norte. Pues bien, Trump ha ganado en todos ellos. Buen provecho.

Román Rubio
Noviembre 2016 

3 comentarios:

  1. Román, en aquest cas la teua lucidesa em sap més bé a acidesa (perdona el rípio). Que Trump no et faça perdre el sentit de l'humor.
    Pregunta no capciosa: perquè situes Washington a la Costa Oest? No ho pille

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  2. Román, sóc un ignorant. Havia confós l'estat de Washington amb Washington DC. Cada vegada trobe més motius per seguir-te.

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